“Seamos Mensajeros de la Luz en un mundo de
muerte” - Papa Francisco
LA GUERRA CONTRA EL
COVID-19
Un virus desconocido
con la cepa de animales
hoy obliga a nacionales
a descansar en su nido
sin el gasto desmedido
de una sociedad moderna
que por dinero está
enferma
sin pensar en medio
ambiente
ni en la angustia de la
gente
que sufre dolencia
interna.
Ya no hay contaminación
pues el aire está más puro
para soñar en futuro
de pujante población
que aprovecha la
ocasión
para mirar sus errores
y empujar sin más récores
el coche del desarrollo
para salir del embrollo
con gran fe sin más
temores.
Hoy la fauna está más
suelta
gozando de libertad
en veredas y en ciudad
y la gente está
resuelta
a no ir más a la revuelta
y a cuidar el paraíso
que sin virus enfermizo
Dios entrego a los
humanos
para vivir como
hermanos
en unión por
compromiso.
Es una guerra sin lanza
que toda la humanidad
debe enfrentar de
verdad
con ilusión y esperanza
restaurando sin
tardanza
los principios y
valores
dejados por
bienhechores
que sembraron equidad
en surcos de libertad
donde crecieron amores.
Gran amor por la
familia
y respeto a los demás
sin mascara ni antifaz,
es el arma que concilia
y que con su fuerza auxilia
para lograr que la unión
resucite en la nación
y combata el cruel
vacilo
que se escapó del asilo
por descuido o
intención.
Mas no hablemos más del
mal
con sentido negativo
busquemos lo positivo
de este encierro
general
y acuñemos en cristal
proyectos para el
mañana
mirando por la ventana
bellezas
del universo
y orando por el
perverso
que cambie su mente
insana.
Y si muero en esta lucha
con sueños y mi verdad
dejo rastros de
hermandad
girando en una garrucha
para que si alguien
escucha
mis palabras por la paz
cultive en tierra feraz
las semillas de armonía
para ver un nuevo día
sin garras de
un ser rapaz.
09 de abril de 2020.
Tiempo de confinamiento ordenado por los gobiernos para enfrenta la pandemia
causada por el coronavirus.
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