Si quiere hacer el bien, no hable con
sus amigos; hable con los necesitados.
Hecocu
En tormentas de dolor y violencia,
que arrasan sentimientos y valores,
camino con la gente en indolencia
ante autistas que son gobernadores.
Por caminos encuentro victimarios
que comparten fatal hipocresía
con poderosos faltos de idearios
que colman mentes con odio y falsía.
En los campos, con rencor abonados,
brotan silvestre flores de cizaña
ante el dolor de muchos desplazados
que sueñan con la luz de la montaña.
En ciudades pasean cual felinos
nuevos ricos con caras prepotentes
quienes muestran a todos los vecinos
sus garras con sostén de dirigentes.
Bajo los puentes se ven correr ríos
con sangre de inocentes pobladores
que sufren en veredas el hastío
y mueren sin lograr tiempos mejores.
Cuando miro el tenebroso horizonte
a través de las nubes de explosiones
se ve volar la gente cual sinsonte
que abandona su nido en las naciones.
¡Oh, pueblo sagrado del universo!
que ve pasar la guerra sin decoro
despierta para no verlo inmerso
entre cadenas, así sean de oro.
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